Los autónomos se encuentran en una encrucijada digital con dos normativas clave que afectarán radicalmente su forma de facturar: la Ley Crea y Crece (para facturas B2B) y el Reglamento Verifactu (Ley Antifraude, para todas las facturas). Aunque relacionadas, sus plazos y requisitos son distintos.
La Ley Crea y Crece obliga a los autónomos a emitir facturas electrónicas únicamente cuando sus clientes son otras empresas o autónomos (B2B). Para ello, tendrán un plazo de dos años desde la aprobación del Reglamento. Esto significa que si un autónomo solo factura a clientes particulares (B2C), esta ley no le obliga a emitir factura electrónica.
Verifactu: La Obligación que Afecta a Todos
Aquí es donde entra la segunda normativa: el Reglamento Verifactu (RD 1007/2023), derivado de la Ley Antifraude. Este reglamento sí afecta a todos los autónomos (y empresas) que emitan facturas, incluidas las facturas simplificadas o tickets a clientes finales (B2C).
Verifactu no obliga a enviar la factura electrónicamente al cliente, pero sí exige que el software de facturación utilizado (denominado «SIF» o Sistema de Emisión de Facturas Verificable) cumpla unos requisitos muy estrictos.
Requisitos Clave de Verifactu
El software Verifactu debe garantizar la integridad e inalterabilidad de los registros de facturación. No debe permitir borrar ni modificar facturas emitidas (solo emitir rectificativas). Además, deberá generar un registro de cada factura y, en muchos casos, incluir un código QR en el documento impreso o digital que permita al cliente (y a Hacienda) verificar su validez.
¿Qué Software Necesita un Autónomo?
El autónomo necesita un software que cumpla ambas normativas si tiene clientes B2B y B2C. Es decir, un software que sea «Verifactu» (para cumplir con la Ley Antifraude, con plazo de implantación el 1 de julio de 2025) y que, además, sea capaz de generar los formatos estructurados (como Facturae) para sus clientes B2B (para cumplir con la Ley Crea y Crece, con plazo posterior).
La mejor estrategia para un autónomo es buscar ya un software en la nube, a menudo de bajo coste o adaptado a sus necesidades, que esté certificado como Verifactu y que ya esté preparado para la facturación electrónica B2B.


